Casa Rural La Libelula Ayna Villa

Reseña de un crítico de hotel

Recientemente tuve la oportunidad de escapar a la Casa Rural La Libélula en Ayna, y puedo decir que ha sido una experiencia inolvidable. Este alojamiento, que destaca por su encanto y decoración acogedora, ofrece un perfecto refugio para quien busca tranquilidad y naturaleza, además de actividades como senderismo y pesca en sus alrededores. María, la amable anfitriona, se encargó de que nuestra estancia fuera aún más especial, brindándonos recomendaciones acertadas sobre los tesoros escondidos de la zona. Cada rincón de la casa está cuidadosamente preparado, con todo lo necesario para una estancia cómoda, aunque debo mencionar que un poco más de atención a la ventilación en el baño sería ideal. Pese a que la casa es un remanso de paz, hay que tener en cuenta que el bullicio ocasional de las calles cercanas puede interrumpir la calma de la noche. Aparte de esto, la relación calidad-precio es absolutamente justa, y con su cercanía a puntos de interés cultural y natural, definitivamente planeo volver a disfrutar de este rincón de Albacete con amigos o familiares. ¡Un 10 para La Libélula!